Hacía tiempo que venía dándole vueltas, a que hacer para poner en la espalda del sillón reclinable, que utiliza mi marido para ver la tele y dormir la siesta.
En un principio pensé en hacer un quilt, pero como no tengo ni idea de técnicas de patchwork y me parece muy difícil lo descarté. Luego en hacer una aplicación, pero al tratarse de un varón, no lo veía tampoco claro.
Luego recordé que tenía varios pantalones vaqueros que ya no se utilizaban y pensé en hacer un rag quilt con ellos, al tener de varios colores, me pareció buena idea y me lancé a la piscina.
Lo que más me costó fue cortar las orillas una vez cosido, ya que las telas son muy gordas y cuatro a la vez, se pueden hacer una idea, pobrecito mi dedo gordo, terminó echando fuegooooooo.....
Y otra anécdota fue, que como tengo la secadora rota, se me ocurrió coger un cepillo de uñas para deshilacharlo, no vean como puse todo, y eso que cuando vi cuanta cantidad de hilos soltaba, me fui al lavabo y puse dentro una palangana, recogí una pala de hilos, aggggggg.
Y este es el resultado, como no tenía la misma cantidad de todos los colores, empecé una secuencia y luego seguí con los que iban quedando.
Y aquí la trasera
Mi marido todavía no lo ha visto, a ver que le parece. Creo que quedó muy masculina, no creen??? Y de paso reciclé 5 pantalones.
Les espero la próxima semana, paseando entre mis madejas de colores, un besote canarión.
